recoger ovejas

había cuatro ovejas, ellas estaban fuera de su cercado, pastando alredor. Yo me escondía un poco para que no me vieran en su avance, estaba detrás de unos matorrales secos, y cuando pasaba la cuarta avanzaba por detrás muy suave para no asustarlas, llevandolas hacia la entrada del cercado, algo como una valla diferente con un espacio para que entraran. El sueño llegaba más o menos hasta ahí. Me quedaba en un conflicto pensando como abrir la valla de entrada y mantenerme al mismo tiempo detrás de ellas para que no se escaparan de nuevo o se asustarán.